El jueves 26 de enero se celebró en el Ilustre Colegio Oficial de Veterinarios de Málaga la Jornada-Coloquio “Alternativas terapéuticas en la estrategia One Health”, organizadas por el Colegio, Boalvet y SEFIT (Sociedad Española de Fitoterapia), dirigida a profesionales y estudiantes de Ciencias de la Salud.
70 personas acudieron al acto en el que intervinieron el Presidente de SEFIT, Salvador Cañigueral, Farmacéutico y profesor del Departamento de Farmacología y Química Terapéutica de la Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación de la Universidad de Barcelona y experto de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ; el Vicepresidente de SEFIT, Bernat Vanaclocha, Médico fitoterapeuta y Director de Cita Publicaciones y Documentación SL, editora de la Revista de Fitoterapia y el Vademecum de Fitoterapia; Rosa Tejada, Veterinaria Vocal de SEFIT y coordinadora del Grupo de trabajo de Fitoterapia Veterinaria de SEFIT, especialista en etología clínica y fitoterapia en pequeños animales; y Álvaro Fernández-B., Veterinario y Miembro co-fundador del Grupo de trabajo de Fitoterapia Veterinaria de SEFIT, CEO de Boalvet e Investigador predoctoral de la Universidad de Sevilla.
A continuación puedes visualizar la celebración de la Jornada al completo:
La sesión fue presentada por el presidente del Colegio, Juan Antonio de Luque, quien destacó el compromiso de la institución por seguir trabajando en la visión One Health, además de ofrecer la más novedosa formación especializada para los colegiados malagueños.
Por parte de Boalvet, su CEO Álvaro Fernández-B., agradeció la cálida acogida del colegio de veterinarios, con el que además se acaba de firmar un convenio de colaboración para ofrecer una formación pionera en el ámbito de la veterinaria acerca de la fitoterapia.
El acto se centró en presentar la fitoterapia como una disciplina con una sólida base de evidencia científica.
Para ello, Salvador Cañigueral, Farmacéutico, Experto de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) que recientemente ha sido elegido Presidente de la Comisión de la Farmacopea Europea, fue el encargado de presentar la entidad que preside, la SEFIT.
SEFIT se fundó en el año 2000, aunque ya en el año 1995 se comenzaron a sentar las bases para construir una sociedad científica que aglutinase a los profesionales que desde diversos campos trabajan en el estudio y la aplicación terapéutica de las plantas medicinales. Así la SEFIT agrupa al ámbito académico, regulador, sanitario y a la propia industria productora, con el objetivo de dar lugar a investigaciones y a la difusión del uso terapéutico de las drogas vegetales. La evolución de socios en los últimos años ha sido ascendente, acogiendo a más de 500 socios, siendo una de las sociedades sobre esta disciplina más fuertes de Europa.
Actualmente la SEFIT tiene 3 grupos de trabajo: Fitoterapia Clínica (con el apoyo de SEMERGEN (Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria), Calidad en fitoterapia, y Fitoterapia Veterinaria.
En palabras de Salvador Cañigueral “Quien no aprende es porque no quiere”, puesto que desde SEFIT se pone a disposición de los interesados una gran cantidad de información y se realizan multitud de actividades formativas, entre ellas el Máster en Fitoterapia, organizado por IL3-Universidad de Barcelona en colaboración con la SEFIT.
Posteriormente, Bernat Vanaclocha, se centró en cómo los profesionales de la salud pueden recetar fitoterapia con seguridad, calidad y eficacia. Comenzó su intervención relatando que a los sanitarios al acercarse por primera a la fitoterapia, ésta puede parecerles un laberinto…Ya que por ejemplo una planta puede conocerse por varios nombres populares; el término droga puede resultarles conflictivo; y los multicomponentes o las sinergias pueden dar lugar a confusión…
Para facilitar la labor del sanitario, se ha creado el vademécum de Fitoterapia, el cual está basado en libros, artículos, las monográficas de ESCOP ((European Scientific Cooperative On Phytotherapy), EMA (European Medicines Agency) y EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria y Agencia Europea de Medicamentos). Este se ve complementado por el portal https://www.fitoterapia.net/, una extensa y poderosa base de datos que incluye monografías de 482 plantas medicinales; información de 164 laboratorios, sus productos fitoterápicos y datos de contacto; y más de 5.500 productos fitoterápicos ( 2.931 presentaciones simples y 2.656 presentaciones compuestas), que además incluye un “buscador terapéutico” que permite realizar búsquedas por acciones farmacológicas (por ejemplo: tranquilizante) y/o por indicaciones (por ejemplo: insomnio).
Por su parte, Rosa Tejada explicó cuáles son las funciones y objetivos del Grupo de Trabajo de Fitoterapia Veterinaria de SEFIT.
Entre ellos está promover el uso racional de la fitoterapia veterinaria en sanidad y bienestar animal; trabajar en la adecuación de los aspectos regulatorios que afecten al uso de la fitoterapia veterinaria, así como participar activamente en el desarrollo de nuevos ámbitos normativos y trabajar en la divulgación de los beneficios y oportunidades de la fitoterapia veterinaria según los principios de calidad, seguridad y eficacia.
La actividad del grupo está centrada en tres áreas temáticas: pequeños animales o animales de compañía, animales exóticos y ganadería o animales de granja.
Entre sus acciones previstas está la celebración de diferentes actividades de formación y por ello se ha organizado junto al Colegio de Veterinarios de Málaga y Boalvet, el curso on-line “Alternativas terapéuticas para enfrentar las RAMs”, el cual dará comienzo el próximo 16 de febrero a través de la plataforma de formación del Colegio de Veterinarios de Málaga https://gesforvet.com/. El curso estará compuesto por 7 módulos y el alumno podrá optar por realizar el curso en su totalidad o cursar los módulos de especialización que mejor se adapten a su perfil: clínica de animales de granja o clínica de animales de compañía.
Para cerrar la jornada, Álvaro Fernández-Blanco, CEO de Boalvet, aportó al conjunto de la exposiciones la visión One Health explicando que cuando aplicamos antibióticos sintéticos mono-molécula (una amoxicilina, una estreptomicina, una penicilina etc.) incluso provenientes de hongos cultivados, a veces olvidamos que para acabar con unas bacterias que hemos considerado son las causantes del problema -muchas veces erróneamente-, colocamos en el medio mensajes que también van a recibir otros seres que allí conviven. ¡Error! Atacamos una población pero olvidamos que hay otras que también se verán afectadas e intentarán defenderse y aprender; otras desaparecerán si son extremadamente frágiles al “mal rollo”, como les pasa a las ya famosas bifidobacterias o lactobacilos que tanto bien nos hacen. ¡Horror!. Hay cientos de especies, cepas, colonias, conviviendo en los ecosistemas digestivos.
El Dr. Alexander Fleming realizó sus primeros trabajos sobre cómo los hongos (Penicillium notatum) se expandían en un medio contrayendo el crecimiento de otros hongos, pudiendo observar cómo éste efecto se reproducía al colocar extractos del medio de cultivo del hongo en presencia de algunas bacterias. Dicho de otra manera, detectó que el misil táctil que los hongos envían a otros hongos para decir “¡Eh! Aquí crezco yo, esta es mi comida. No te acerques o te fulminaré”, supone una liberación al medio de moléculas como la conocida penicilina, que también tienen ese mismo efecto asustadizo o destructor sobre otros microorganismos a los que no quieres hacer daño (bacterias, hongos, protozoos).
¿Cómo podemos explicar este fenómeno multi-especie? Evidentemente esto se explica porque todos los seres vivos estamos hechos de los mismos elementos químicos, compartimos rutas metabólicas y, sobre todo, compartimos la estructura del mensaje más profundo y primigenio que nos define a todos, a toda la vida de este planeta: El ADN. Esta es la cuestión principal que nos lleva a estudiar los genes de resistencias a antibióticos. Estos mensajes se hayan desde hace milenios en el planeta, son indestructibles por completo a la par que altamente transmutables, por lo que la única forma de hacerlos “desaparecer” es diluirlos en el medio con el paso del tiempo.
Para finalizar resaltó la importancia de la formación para poder seguir avanzando en esta materia que en la actualidad no está tan desarrollada en el ámbito veterinario como en la medicina humana. Hay que leer, aprender, experimentar y probar para poder seguir avanzando en el ámbito de la fitoterapia veterinaria.